Por Luís Gotte: La provincia de Buenos Aires se divide administrativamente en 135 municipios llamados constitucionalmente Partidos, esta denominación surge porque entre 1821 y 1854 el territorio bonaerense estuvo administrado por jueces de paz y su jurisdicción se correspondía con un partido judicial. Ese es el motivo histórico por el cual a las divisiones territoriales de segundo orden de Argentina dentro de esta provincia se las llama así, mientras que en las demás provincias se utiliza el término departamento, y en la Ciudad autónoma de Buenos Aires el término comunas. Cada partido comprende una extensión territorial continua, en la que se sitúan una o más localidades (sistema de ejidos colindantes). El órgano de gobierno de cada partido/ municipio es la municipalidad, compuesta de un departamento ejecutivo y de un departamento deliberativo.

La Constitución de la Provincia de Buenos Aires es una de las pocas de las provincias argentinas que aún no reconoce expresamente la autonomía municipal, a pesar de que su reforma de 1994 fue sancionada meses después de la reforma de la Constitución Nacional que confirmó la autonomía municipal. Nuestros Partidos-municipios se rigen por un DECRETO de la DICTADURA DE ROJAS-ARAMBURU, y que ha sido avalada por todos los gobiernos democráticos, no porque sea perfecta. La realidad, les permite mantener la matriz de corrupción instalada.

Lo trágico en todo esto, más allá de la corrupción, es que nuestros Municipios tienen una ciudad cabecera y alrededor pueblos y pequeñas ciudades denominadas DELEGACIONES MUNICIPALES, sin recursos y apoyo económico, a cargo de un DELEGADO elegido directamente por el Intendente (como un Señor feudal, que manda a su representante a las aldeas). Estas Delegaciones, como Batán, Cte. N. Otamendi, Santa Clara, Quequén, etc son olvidadas por el poder central, sus paisanos no tienen respuestas a sus requerimientos, no se invierten en infraestructura y termina migrando a la ciudad capital formando pequeños conurbanos.

Las delegaciones se están vaciando de paisanos, las urbes se están amontonando de gente desesperada.

La Provincia de Buenos Ayres necesita crear un Instituto de Poblamiento -estrategia y organización-, un Instituto Municipal y Federal, que articule estos conceptos con los programas de estudio inicial y medio. Necesitamos políticos con mentalidad municipalista y federal…de lo contrario seguiremos empobreciéndonos como provincia.

El gobernador porteño de la Provincia, y el diputado santacruceño por Buenos Ayres, han manifestado que no cambiarán nada.

Luis Gotte
La trinchera federal